Receta de Marmitako de bacalao
El Marmitako es una receta tradicional del norte de España, especialmente en el País Vasco, y aunque en su receta original se prepara con bonito, es un plato que permite el uso de diferentes clases de pescado.
En este caso, queremos compartir contigo una receta diferente y vamos a hacerlo con pescado tan delicioso como es el bacalao.
La receta que os proponemos es para cuatro personas, es muy fácil de hacer siempre que se vaya paso a paso y además de asequible es realmente deliciosa. ¿Te animas a prepararla?
Ingredientes para 4 personas
Para la elaboración de esta receta necesitarás los siguientes ingredientes:
- 1kg de bacalao fresco.
- 5 patatas medianas.
- 3 cebollas.
- 2 dientes de ajo pequeños.
- 100 gramos de tomate triturado (mejor si es natural)
- 1 pimiento rojo.
- 1 pimiento verde.
- 1 zanahoria.
- 1 cebolla.
- Perejil fresco (un manojo pequeño)
- 2 hojas de laurel.
- 1 cuchara rasa de pimentón dulce
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal (al gusto)
Como hacer un marmitako de bacalao
Lo primero que debemos hacer es limpiar bien el bacalao, quitándole con cuidado todas las espinas que pueda tener y la piel. Reservamos y cortaremos el bacalao en trozos de unos 4 centímetros para que se noten bien cuando el guiso esté preparado.Reservaremos los trozos de bacalao y pasaremos a hacer el caldo de pescado.
En una cazuela vertemos un litro de agua junto a las espinas y la piel del bacalao (si tenemos la cabeza mucho mejor porque proporcionará mucho más sabor), la zanahoria, media cebolla, un chorro de aceite de oliva y una hoja de laurel.
Lo dejaremos hervir poco a poco a fuego medio durante media hora y tras ello lo colaremos y reservaremos para más adelante.
Para evitar cualquier clase de filtración, lo mejor es colarlo dos veces y quitarle la espuma a medida que se vaya haciendo el caldo.
En caso de que no hayáis encontrado pescado fresco y lo que tengáis son filetes de bacalao sin piel ni espinas, siempre se puede utilizar caldo preparado, pero que sea de calidad.
Picaremos en brunoise la cebolla y los ajos, un poco más grandes los pimientos y haremos un refrito hasta que la cebolla se comience a pochar junto a un buen chorro de aceite de oliva virgen extra. Lo dejaremos a fuego medio removiéndolo cada poco para evitar que el ajo se queme y pueda producir amargor.
Mientras se va haciendo, lavaremos, pelaremos y picaremos las patatas en trozos medianos, pero no hay que picarlas con el cuchillo sino que hay que chascarlas para que cuando estén cociendo vayan soltando poco a poco el almidón y espesen el caldo.
En el momento en el que el sofrito esté hecho, incorporaremos las patatas y lo rehogaremos durante un par de minutos. Incorporaremos el pimentón dulce, todo el tomate triturado y lo volveremos a rehogar otro par de minutos.
Incorporaremos el caldo que tenemos reservado, pero procurando que esté caliente, para no romper la cocción de las patatas, el laurel y la sal al gusto. Tapamos la cazuela y lo dejaremos cocer todo a fuego bajo/medio hasta que veamos que las patatas están hechas.
Es en ese momento en el que tendremos que incorporar los trozos de bacalao limpios que tenemos reservados desde el principio.
Tapamos la cazuela, la movemos con las manos para que se mezcle el pescado con el resto de ingredientes y lo dejaremos unos cinco minutos aproximadamente, no mucho más, porque de lo contrario el pescado se secaría y la textura no sería la esperada.
Para finalizar, picaremos el perejil fresco y lo espolvoreamos por encima del guiso y lo serviremos directamente en una fuente o directamente en los platos para comer bien caliente.