Marmitako de atún claro fresco
Aunque pueda parecer lo mismo, el bonito y el atún claro, a pesar de ser de la misma familia (Thunnus) no son iguales.
El atún claro es otra clase de pescado con el que también se puede hacer un delicioso Marmitako como el que os vamos a enseñar a hacer en este artículo.
Qué ingredientes necesitamos
- 3/4Kg. de atún claro fresco.
- 800 gramos de patatas.
- 1 cebolla grande.
- 1 pimiento verde.
- 3 dientes de ajo
- 200 gramos de tomate triturado (mejor si es natural)
- 200 mililitros de vino blanco seco.
- 1 cucharada de pulpa de pimiento choricero.
- 1 hoja de laurel.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Pimienta negra molida.
- Sal. (Al gusto)
Vamos a preparar el marmitako de atún:
Lavaremos bien el trozo de atún, el cual trocearemos en forma de dados medianos para que se puedan comer cómodamente cuando el guiso esté preparado. Una vez lo hayamos troceado lo salpimentaremos y lo reservaremos.
El siguiente paso es lavar el pimiento verde, abrirlo y retirarle todas las pepitas y lo picamos en brunoise así como la cebolla y los ajos.
En esta receta se puede utilizar también pimiento choricero, pero para ello tendremos que hidratarlo correctamente el día anterior o si se nos ha olvidado podremos hidratarlo en agua caliente durante una hora a fuego medio.
Lo abriremos, quitaremos las pepitas y con una cuchara le sacaremos la pulpa del interior y ya se podrá incluir en el sofrito. Si no se tiene, se puede optar por comprar un bote con la pulpa, que ya están listos para utilizar. Por otro lado, también necesitamos tomate triturado, pudiendo ser de lata, aunque lo mejor es el que hagamos con tomates naturales y la trituradora.
Lavaremos, pelaremos y chascaremos las patatas para que suelten el almidón y el caldo sea un poco más espeso.
En una sartén con un chorro de aceite de oliva virgen a fuego medio pasaremos los trozos salpimentados de atún, el objetivo es sellarlos por fuera. Para ello hay que ir dándoles vuelta por todos sus lados. Cuando estén dorados los sacaremos de la sartén y los reservaremos para después.
En esa misma sartén podremos ir haciendo el sofrito de las verduras, incorporando un poco más de aceite si fuera necesario. Lo primero que hay que hacer es sofreír la cebolla echándole un poco de sal por encima para que suelte el agua y se haga antes.
Después incorporaremos el pimiento, los ajos y el laurel, haciéndolo todo a fuego lento.
Cuando se haya hecho todo el sofrito, incorporaremos las patatas que tenemos reservadas y las rehogaremos durante unos minutos mientras vamos removiendo de vez en cuando moviendo la cazuela con las manos. Tras unos 5 minutos incorporaremos el vino blanco y dejaremos que el alcohol se evapore, todo ello a fuego fuerte.
Una vez hecho, bajaremos fuego medio suave e incorporaremos el tomate triturado, la pulpa del pimiento choricero en caso de que lo tengamos, y un poco de pimentón dulce, aunque también se puede echar la punta de una cuchara de pimentón picante si quiere darse un toque diferente a este plato.
El siguiente paso es cubrirlo todo de agua o mucho mejor de caldo de pescado, que puede ser preparado, aunque lo mejor es lo natural, con una cabeza de rape o de merluza, todo ello bien cocido y colado posteriormente. Lo dejaremos todo cocer durante media hora aproximadamente.
Es importante que las patatas no se queden sin caldo y si vemos que durante la cocción se va quedando el guiso corto de caldo, iremos incorporando más.
Hay que recordar que este plato tiene que tener caldo, que es como se sirve el auténtico Marmitako. Cuando las patatas ya estén listas se incorporará el atún troceado y lo dejaremos cocer todo durante 5 minutos a fuego lento para que todo se acabe de hacer y se mezclen bien los sabores.
¡Buen provecho!